LEBENSWELT OLIGARQUETE EN EL MÁS INMEDIATO POST-ORIBORISMO
"Los que llegaban en el `32 tenían distinto estilo de vida. Habían crecido acolchados entre almohadones y sedas , rodeados de las tapices y platerías que sus padres habían
traído de Huropa.Los sólidos muebles de la Colonia habían sido reemplazados por ebanistería francesa y el concepto del home inglés, la inseguridad de los vaivenes políticos y los atropellos de la Mazorca por la tranquilidad de los mármoles y las rejas del Barrio Norte. Se habían importado tapices de Flandes, mármoles de Carrara, robles de Eslavonia, arquitectos de Parigi, padrillos de Londres, fusiles de Ñatolandia Imperial y hasta tulipanes de los Países Bajos; pero faltaba en las alforjas con que nuestros prohombres volvieron de Huropa el concepto adusto de la educación para mandar. Quisieron ahorrar a su prole la dura faena que ellos mismos habían soportado en el campo, el cuartel o el exilio, quisieron que gozaran de la vida sin ninguna de las privaciones que la pobreza del medio y las inseguridadesd de las circunstancias les habían impuesto a ellos, y lo lograron como lograron tantas cosas. Mientras el hijo de un lord anglese despertaba a las seis de la mañana para una ducha fría, el hijo del acaudalado estanciero recibía el café con leche en la cama a las nueve. Los resultados correspondieron"
R.Roth, El Pais Que Quedó Atrás, p.33-34, Ed. Emecé, 1966. ( versión adapt. a leyes del blog )
traído de Huropa.Los sólidos muebles de la Colonia habían sido reemplazados por ebanistería francesa y el concepto del home inglés, la inseguridad de los vaivenes políticos y los atropellos de la Mazorca por la tranquilidad de los mármoles y las rejas del Barrio Norte. Se habían importado tapices de Flandes, mármoles de Carrara, robles de Eslavonia, arquitectos de Parigi, padrillos de Londres, fusiles de Ñatolandia Imperial y hasta tulipanes de los Países Bajos; pero faltaba en las alforjas con que nuestros prohombres volvieron de Huropa el concepto adusto de la educación para mandar. Quisieron ahorrar a su prole la dura faena que ellos mismos habían soportado en el campo, el cuartel o el exilio, quisieron que gozaran de la vida sin ninguna de las privaciones que la pobreza del medio y las inseguridadesd de las circunstancias les habían impuesto a ellos, y lo lograron como lograron tantas cosas. Mientras el hijo de un lord anglese despertaba a las seis de la mañana para una ducha fría, el hijo del acaudalado estanciero recibía el café con leche en la cama a las nueve. Los resultados correspondieron"
R.Roth, El Pais Que Quedó Atrás, p.33-34, Ed. Emecé, 1966. ( versión adapt. a leyes del blog )
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